Taberna El Caldero, un trocito de Murcia en Madrid
http://www.dontstopmadrid.com/2019/04/taberna-el-caldero-un-trocito-de-murcia.html
Hasta hace un par de años poco conocía yo de la gastronomía murciana. Un gran error que por suerte ya estoy enmendando. No podemos hablar de los sabores de Murcia sin nombrar su característica huerta de interior, así como de su menos conocida faceta marinera. Tampoco podemos dejar de hablar de la gastronomía murciana en Madrid sin hacer referencia a El Caldero, lugar del que hoy os quiero hablar.
El Caldero tiene dos locales en Madrid. Su restaurante principal situado en el Barrio de Las Letras (Calle Huertas 15) y su versión taberna situado por la zona de Atocha, a pocos metros del metro de Menéndez Pelayo, en la Calle Travesía de Tellez 2. Yo fui a la taberna y surgió el flechazo.
La taberna tiene dos espacios, uno típico de barra de bar para tomarte una cañas con tu aperitivo y luego tiene la zona de mesas, muy bien puestas y decoradas para sentirte un poquito junto al mar. La carta es extensa, con una calidad-precio imbatible y unas raciones muy generosas.
La carta es Murcia en estado puro, del cual solo echamos en falta los michirones. Comenzamos abriendo boca con las clásicas marineras (3 euros) acompañadas de una caña bien fría, para que te puedas sentir como en la mismísima Plaza de las Flores. Las marineras son las tapas más características de la región. Son como un barco hecho de colín que lleva encima ensaladilla rusa y una anchoa. Ésta además venía con tapena, con su característico sabor amargo que marida estupendamente con la cerveza.
Todo lo que llega a la mesa viene directo de Cabo de Palos. Es decir, hay buena materia prima y eso se nota. Miramos hacia el interior de Murcia y vamos directos a la huerta, con una ración de zarangollo (8,25 euros) que quita el sentido. Es el típico plato que hace la gente con lo que tiene en el campo. Delicioso y media ración más que suficiente.
Seguimos con una coca de sardinas con vinagreta y tomate (5,40 euros media ración) deliciosa. El formato no es como lo esperaba, ya que venían con una masa fina y redondeada para comerla en un par de bocados en formato individual. Formato diferente, sí... pero buenísimo, que es lo importante. Le siguió un plato fuera de carta que nos recomendaron (merecidamente). Se trata de unas alcachofas rehogadas, sabrosas, delicadas y bien preparadas. Sin ser yo mucho de alcachofas me pareció una delicia.
Pero bueno, vamos a lo importante. El Caldero no se llama así porque sí, sino porque preparan el mítico arroz al caldero (29 euros / 2 personas), tan de Murcia, sobre todo de Cabo de Palos. Lo elegimos con mujol, que nos pusieron aparte y que fuimos racionando nosotros en cada bocado. El arroz estaba en un punto perfecto y el sabor era inmejorable. ¡Qué maravilla! Lástima que haya tardado tanto en conocerlo. No os podéis ir sin probar una ración de arroz, ya que son especialistas. Y si tenéis que elegir, que sea arroz al caldero. No os arrepentiréis.
Cuando pensábamos que nada podía mejorar la copiosa comilona que nos estábamos dando vino el cierre final, los paparajotes. Se trata de un postre muy de Murcia que consiste en rebozar una hoja de limonero y prepararlo como un buñuelo. La hoja le da un marcado sabor cítrico (que por supuesto tenéis que sacar antes... ¡la hoja no se come!). En la Taberna El Caldero además te lo flambean en la mesa y lo acompañan con un electrizante helado de limón.
¿Vaya buena comida verdad? Lo cierto es que además vimos que el personal era encantador con todos los clientes, sacaban los platos a una velocidad conveniente y nos sentimos como si por unas horas, hubiésemos viajado unos cuantos kilómetros. ¡Sin duda repetiré!
No dejéis de probarlo y si tenéis pereza y no os apetece salir de casa deciros también que hacen paellas para llevar ;)
El Caldero tiene dos locales en Madrid. Su restaurante principal situado en el Barrio de Las Letras (Calle Huertas 15) y su versión taberna situado por la zona de Atocha, a pocos metros del metro de Menéndez Pelayo, en la Calle Travesía de Tellez 2. Yo fui a la taberna y surgió el flechazo.
La taberna tiene dos espacios, uno típico de barra de bar para tomarte una cañas con tu aperitivo y luego tiene la zona de mesas, muy bien puestas y decoradas para sentirte un poquito junto al mar. La carta es extensa, con una calidad-precio imbatible y unas raciones muy generosas.
La carta es Murcia en estado puro, del cual solo echamos en falta los michirones. Comenzamos abriendo boca con las clásicas marineras (3 euros) acompañadas de una caña bien fría, para que te puedas sentir como en la mismísima Plaza de las Flores. Las marineras son las tapas más características de la región. Son como un barco hecho de colín que lleva encima ensaladilla rusa y una anchoa. Ésta además venía con tapena, con su característico sabor amargo que marida estupendamente con la cerveza.
Todo lo que llega a la mesa viene directo de Cabo de Palos. Es decir, hay buena materia prima y eso se nota. Miramos hacia el interior de Murcia y vamos directos a la huerta, con una ración de zarangollo (8,25 euros) que quita el sentido. Es el típico plato que hace la gente con lo que tiene en el campo. Delicioso y media ración más que suficiente.
Seguimos con una coca de sardinas con vinagreta y tomate (5,40 euros media ración) deliciosa. El formato no es como lo esperaba, ya que venían con una masa fina y redondeada para comerla en un par de bocados en formato individual. Formato diferente, sí... pero buenísimo, que es lo importante. Le siguió un plato fuera de carta que nos recomendaron (merecidamente). Se trata de unas alcachofas rehogadas, sabrosas, delicadas y bien preparadas. Sin ser yo mucho de alcachofas me pareció una delicia.
Cuando pensábamos que nada podía mejorar la copiosa comilona que nos estábamos dando vino el cierre final, los paparajotes. Se trata de un postre muy de Murcia que consiste en rebozar una hoja de limonero y prepararlo como un buñuelo. La hoja le da un marcado sabor cítrico (que por supuesto tenéis que sacar antes... ¡la hoja no se come!). En la Taberna El Caldero además te lo flambean en la mesa y lo acompañan con un electrizante helado de limón.
¿Vaya buena comida verdad? Lo cierto es que además vimos que el personal era encantador con todos los clientes, sacaban los platos a una velocidad conveniente y nos sentimos como si por unas horas, hubiésemos viajado unos cuantos kilómetros. ¡Sin duda repetiré!
No dejéis de probarlo y si tenéis pereza y no os apetece salir de casa deciros también que hacen paellas para llevar ;)
TABERNA MURCIANA
91 501 61 90
reservastellez@elcaldero.com
Travesía Téllez, 2 28007 Madrid
REST. EL CALDERO
91 429 50 44
reservashuertas@elcaldero.com
Calle Huertas 15, 28012 Madrid
¡Tu opinión es muy importante para nosotros! Déjanos un comentario :-)