Serafina: todos los ingredientes para la velada perfecta
http://www.dontstopmadrid.com/2015/03/serafina.html
Reconozco que la zona de Sol nunca ha estado entre mis zonas predilectas para buscar un restaurante porque lo considero más bien territorio guiri. Sin embargo si se pasan por alto los injustos clichés, es posible encontrar lugares en los que cuidar el paladar a base de cocina hecha con cariño. Hace unas semanas viví un flechazo con Serafina, un nuevo restaurante situado en la céntrica calle Espoz y Mina, a un minuto (literalmente) de Sol.
Mi enamoramiento con Serafina comenzó desde el principio, cuando me recibió un local cuidado y maravillosamente decorado con todos los must have del momento: ladrillo visto, azulejo, lamparas antiguas y recicladas... La planta baja tiene una gran barra que invita al cañeo, siendo la planta de arriba la más indicada para comer o cenar como mandan los cánones.
Subimos y el enamoramiento no hace más que incrementar. Nos reciben plantas, un sofá chester, madera, luces de ambiente, una chimenea... ¿Estoy como en casa? (aunque ójala mi casa sea así...). ¿Será todo mera decoración o la comida estará a la altura? Pido algo para beber y voy mirando la carta... y qué maravilla, ¡todo me apetece!
La carta es muy variada y está basada en cocina de toda la vida pero con toque contemporáneo. Como éramos unos cuantos en la mesa nos decidimos por platos para compartir y así probar lo más posible y porque compartir es vivir. Empezamos con un foie casero (17€) de padre y muy señor mío, al cual le siguió una rica ensalada con mejillones (9,50€), sencilla pero muy rica, porque cuando la materia prima es buena, se nota y no hacen falta muchos más aderezos.
Seguimos con los platos para compartir, entre ellos el wantan de langostino y huevas de salmón con curry rojo (9,50€) que me encantaron pese a que soy poco tolerante al picante... pero cuando algo está bueno no importa! Seguimos con unas ricas croquetas de jamón (instafan de ellas) y de carabineros. Si no te decides puedes pedir una ración (o media) mezcladitas.
Tras esto siguió un rico tataki de atún con piperrada de pimiento amarillo (18€) absolutamente delicioso, con un pescado de una calidad excelente. Un auténtico must en Serafina en el que tradición y modernidad se dan la mano.
A estas alturas de la película ya tenía el estómago absolutamente saciado pero en la mesa teníamos a dos zamoranos que no podían irse sin probar el chuletón de Zamora con patatas (32€ unos 700gr. de carne ya limpia). ¡Cómo se nota cuando la carne es buena! Viva Zamora y su calidad, menudo manjar! Yo no soy muy carnivora pero me encantó la carne tan bien hecha y jugosa.
Ya estabamos requetesatisfechos pero... ¿y los postres? Al ser tanta gente no nos decidíamos porque cada uno tiene su preferencia así que... from lost to the river, nos pedimos cuatro! Los postres tienen un precio de 5€ cada uno y son totalmente caseros. Aquí no tengo dudas sobre cual es el mejor.... Solo con oír su nombre lo sabréis. Tarta de plátano con dulce de leche: el mejor postre del mundo. Eso es así. No obstante también me gustaron la tarta de queso, la tarta de zanahoria y el coulant de chocolate... pero nada que iguale a mi adorada tarta de plátano y dulce de leche. Aún babeo pensando en ella...
Y con esto (bastante comimos ya), acabó la rica cena entre amigos. Decoración bonita, atención con mimo, buena materia prima, carta variada y para todos los gustos y un ticket medio de 25-30€ aproximadamente. Todos los ingredientes para ser el sitio infalible.
Mi enamoramiento con Serafina comenzó desde el principio, cuando me recibió un local cuidado y maravillosamente decorado con todos los must have del momento: ladrillo visto, azulejo, lamparas antiguas y recicladas... La planta baja tiene una gran barra que invita al cañeo, siendo la planta de arriba la más indicada para comer o cenar como mandan los cánones.
Subimos y el enamoramiento no hace más que incrementar. Nos reciben plantas, un sofá chester, madera, luces de ambiente, una chimenea... ¿Estoy como en casa? (aunque ójala mi casa sea así...). ¿Será todo mera decoración o la comida estará a la altura? Pido algo para beber y voy mirando la carta... y qué maravilla, ¡todo me apetece!
La carta es muy variada y está basada en cocina de toda la vida pero con toque contemporáneo. Como éramos unos cuantos en la mesa nos decidimos por platos para compartir y así probar lo más posible y porque compartir es vivir. Empezamos con un foie casero (17€) de padre y muy señor mío, al cual le siguió una rica ensalada con mejillones (9,50€), sencilla pero muy rica, porque cuando la materia prima es buena, se nota y no hacen falta muchos más aderezos.
Seguimos con los platos para compartir, entre ellos el wantan de langostino y huevas de salmón con curry rojo (9,50€) que me encantaron pese a que soy poco tolerante al picante... pero cuando algo está bueno no importa! Seguimos con unas ricas croquetas de jamón (instafan de ellas) y de carabineros. Si no te decides puedes pedir una ración (o media) mezcladitas.
Tras esto siguió un rico tataki de atún con piperrada de pimiento amarillo (18€) absolutamente delicioso, con un pescado de una calidad excelente. Un auténtico must en Serafina en el que tradición y modernidad se dan la mano.
A estas alturas de la película ya tenía el estómago absolutamente saciado pero en la mesa teníamos a dos zamoranos que no podían irse sin probar el chuletón de Zamora con patatas (32€ unos 700gr. de carne ya limpia). ¡Cómo se nota cuando la carne es buena! Viva Zamora y su calidad, menudo manjar! Yo no soy muy carnivora pero me encantó la carne tan bien hecha y jugosa.
Ya estabamos requetesatisfechos pero... ¿y los postres? Al ser tanta gente no nos decidíamos porque cada uno tiene su preferencia así que... from lost to the river, nos pedimos cuatro! Los postres tienen un precio de 5€ cada uno y son totalmente caseros. Aquí no tengo dudas sobre cual es el mejor.... Solo con oír su nombre lo sabréis. Tarta de plátano con dulce de leche: el mejor postre del mundo. Eso es así. No obstante también me gustaron la tarta de queso, la tarta de zanahoria y el coulant de chocolate... pero nada que iguale a mi adorada tarta de plátano y dulce de leche. Aún babeo pensando en ella...
Y con esto (bastante comimos ya), acabó la rica cena entre amigos. Decoración bonita, atención con mimo, buena materia prima, carta variada y para todos los gustos y un ticket medio de 25-30€ aproximadamente. Todos los ingredientes para ser el sitio infalible.
Serafina
Calle Espoz y Mina, 4 < M > Sol
Teléfono: 915 32 43 16
www.serafinacocinabar.com
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